Han sido muchas las vivencias que han tenido y que los han ido preparando para la ocasión: misas catequéticas, catequesis familiar, la primera confesión, la entrega de la biblia y la imposición de la cruz… En definitiva, dos años de preparación para estar en el mejor momento para recibir por primera vez a Jesús.
Las primeras comuniones tuvieron lugar en el especial y majestuoso Monasterio de Sant Cugat del Vallès. A medida que iban llegando las familias en la plaza de Octavià, fueron entrando y cogiendo lugar mientras los alumnos acompañados por sus tutores se preparaban en la entrada a la iglesia y se daban las últimas indicaciones.
Las familias (padres, hermanos, abuelos, tíos…) iban entrando ocupando los lugares que tenían reservados. A continuación los chicos fueron entrando en dos filas por el pasillo central de la iglesia y se fueron colocando por orden en su lugar.
La ceremonia tuvo varios momentos emotivos… pero hay que hacer mención del momento en que renovaron las promesas bautismales y donde Mn. Àlex, quién los ha acompañado hasta ahora, fue denominándolos uno a un a la vez que se levantaban del lugar.
Finalmente, los alumnos pudieron hacer su Primera Comunión y recibir por primera vez a Jesús. Al final de la celebración, un matrimonio en representación de todos, dirigió la Oración a la Virgen María donde se confía los niños a su protección y se comprometen a guiarlo y encaminarlo por el camino de la fe. Una vez acabada la oración toda la iglesia, acompañada por la magnífica coral de la AMPA de madres y padres de la Vall y de La Farga, entonó el canto del Virolai.
Desde la escuela queremos felicitar a todos los alumnos y a sus familias por este día tan especial que pudieron vivir y disfrutar!
