Tres días muy formativos

Los alumnos de 2.º de ESO han estado de convivencias durante tres días, del 27 al 29 de septiembre, a las instalaciones del Poblado de Torreciudad

Los alumnos de 2.º de ESO han estado de convivencias durante tres días, del 27 al 29 de septiembre, en las instalaciones del Poblado de Torreciudad (Huesca) junto con sus tutores y profesores, Mn Josepmaria Quintana, y alumnos de 1.º de Bachillerato como monitores.


Son días muy formativos, puesto que además de las charlas orientadas en la Confirmación y las catequesis del mosen, también se trabajan aspectos de virtudes humanas como el compañerismo, la sobriedad, el respeto, la generosidad, etc. Se aprende tanto por el que se llama como por el que se observa en los compañeros. Cuando uno está en el comedor, piensa al llenar el vaso de agua del compañero, al dejar limpio el lugar, al ser amable con las señoras que sirven en la barra,... Todo es formativo porque buscamos una formación integral, que alcanza todas las dimensiones de la persona.

El segundo día de estancia a la convivencia empieza con la subida al Santuario. Una hora de camino que se hace muy agradable bordeando la presa del Grado. El buen ambiente se percibe en caras sonrientes que van a encontrarse con la Virgen María. Ya en el Santuario, todos recuerdan otros momentos que lo han visitado: en los campamentos de Primaria con padres, en la imposición de la cruz, o en la reciente Jornada de las Familias. En la cripta se reza el Rosario por todas las familias y por las intenciones de cada cual y, los alumnos que quieren, aprovechan para confesarse en uno de los múltiples confesionarios. Después se sube a la nave principal, donde nos muestran el videomaping del retablo, con una imaginaria conversación que mantienen la Virgen María y San Josemaria. Les gusta tanto que al final surge espontáneamente un buen aplauso. Al salir se hace la clásica foto de grupo en las escaleras; sin duda, un gran recuerdo.

Finalmente, pero no menos importante, la actividad deportiva juega un papel fundamental a las convivencias. Se organiza un torneo en el cual los grupos, distribuidos en doce equipos, se enfrentan en partidos de fútbol 7, futbito, baloncesto, y futvòlei. El deporte enseña a practicar la humildad, la deportividad, la competitividad muy entendida, y refuerza los lazos de amistad.

En definitiva, han sido unos grandes días que marcan el tono del curso y hacen hincapié en la importancia de formarse bien para recibir el próximo mes de mayo el Sacramento de la Confirmación.

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